Asistí al magnífico homenaje a Rubichi en el teatro villamarta. Diego de los Santos, gitano cabal, discreto, familiar, con una voz afillá, encallecida como buen cantaor que se entrega en cada uno de sus cantes.
Muchos artistas, jóvenes, menos jóvenes. desde Paco Gasolina, Rancapino, Mateo Soleá, de la Morena, o Antonio Reyes, Quini, Jesús Mendez, Elu, Capullo, Salmonete…
Estuvo entretenido y con buenas guitarras y palmeros, así como el baile de Carmen Herrera y Gema Moneo.
Lleno lo que desde mi localidad podía ver.