“Mientras mas increíble es una calumnia, mas memoria tienen los tontos para recordarla” (Delavigne). ¿Y qué es la verdad? Dijo Pilatos lavándose las manos. “La verdad” era también el principal periódico de la URSS que en ruso es “Pravda”. Hace tiempo se utiliza el concepto de “posverdad” que es el resultado de mentir con tal verosimilitud que aparece como una verdad indiscutible, que se puede decir una cosa y la contraria y las dos presumir de verdad auténtica. La posverdad es la manipulación perfecta, que no cuesta esfuerzo creerla.
Repitiendo en muchas ocasiones que el actual gobierno es ilegítimo por su apoyo de comunistas, separatistas y terroristas, esa ilegitimidad puede ser argüida por los sindicatos de policías y guardias civiles que se manifestaron contra el proyecto de ley de seguridad ciudadana. O también por esos militares jubilados que afirmaron que la solución era fusilar a varios millones de “hijos de…”
El Presidente de Gobierno ha sido llamado en el Congreso: Felón, ilegítimo, mentiroso compulsivo, traidor, irresponsable, ególatra, escarnio para España, mediocre, ocupa, incompetente, desleal, ridículo, rehén de terroristas. Con el solo el fin de mantenerse en el poder. El otro día el líder de la oposición ya pasó a lo chabacano, lanzándole un improperio que ofende tanto a mujeres como a hombres. La grosería y la mentira se abren paso en el Congreso.